Se recomienda hacer una biopsia de próstata cuando el Antígeno Prostático Específico (APE / PSA) es anormal, si se detecta un nódulo sospechoso en el tacto rectal o después de una resonancia magnética multiparamétrica (RMN) en casos especiales. La toma de biopsias de próstata suele hacerse de forma ambulatoria, en el consultorio del urólogo, y bajo sedación o anestesia leve. Se indican antibióticos para usar antes y después de la biopsia, reduciendo el riesgo de infección. Se utiliza un transductor de ultrasonido a través del recto para visualizar la próstata y dirigir la toma de las muestras, que serán después enviadas al laboratorio de Patología, en busca de células malignas. Es frecuente notar sangre en la orina o excremento los días siguientes.